lunes, 2 de octubre de 2006

Expertos aseguran que el desarrollo de niños en parejas homosexuales es normal


El desarrollo emocional, cognitivo y afectivo de los hijos criados por parejas homosexuales no difiere de los que han crecido con parejas heterosexuales, según refleja un estudio elaborado por la Decana de la Facultad de Psicología de la Universidad de Valencia, María Vicenta Mestre.

El estudio, realizado sobre los estilos de crianza de 1.400 chicos entre 9 y 13 años, indica que la estabilidad emocional y capacidad de control es independiente del sexo de los padres.

Padres y madres homosexuales ejercen sus funciones paténtales de cuidado, afecto y orientación del mismo modo que los heterosexuales, según recoge el estudio.

Por ello, los niños criados bajo este modelo familiar desarrollan su conducta social, su inteligencia, capacidad afectiva y comportamiento sexual como cualquier otro niño o adolescente, sin que su orientación sexual se vea afectada por la de sus padres, según las mismas fuentes.

De hecho, las conclusiones del informe reflejan que la probabilidad de que estos niños sean adultos gays no es mayor que la de los niños de padres heterosexuales. (La tasa de prevalecía es similar a la de la población general, un 10% aproximadamente).

Este análisis es uno de los temas que integran el calendario de ponencias del próximo Congreso Nacional de la Sociedad Española de Pediatría Extrahospitalaria y Atención Primaria, que se celebrará del 16 al 19 de septiembre.

En los últimos años, la familia tradicional ha dejado paso a nuevos modelos familiares (padres separados o divorciados, parejas de hecho, parejas homosexuales, adopciones) que lógicamente influyen en el crecimiento de los hijos y en la formación de su carácter.

Para Mestre, la transmisión de valores, capacidad de control, orden, y afabilidad por parte de los padres hacia los hijos son los puntos fundamentales sobre los que los chavales desarrollarán su comportamiento y conformarán su carácter.

Esto debe llevarse a cabo en un entorno afectivo estable, sin críticas ni rigidez excesiva, pero marcando límites y normas familiares propias, con independencia de la presencia de uno o de ambos progenitores o del sexo de los mismos.

GayBarcelona.net

Una pareja gay logra la primera adopción de un bebé catalán
Un matrimonio gay, residente en la provincia de Barcelona, ha logrado por primera vez en Catalunya la adopción de un bebé, según confirmó ayer la consellera de Benestar i Família, Carme Figueras. El bebé, que aún no ha cumplido el año, lleva viviendo con los dos hombres desde antes del verano. La pareja pasó con todos los parabienes el periodo preadoptivo y el juez le ha otorgado la custodia definitiva del menor.


Es la primera adopción de estas características que se formaliza desde que en marzo del 2005 una modificación del Código de Familia de Catalunya permitió la adopción a las parejas gays y de que en julio del mismo año una modificación del Código Civil español legalizó el matrimonio de los homosexuales y les otorgó todos los derechos, incluida la adopción de menores.

La noticia fue recibida con satisfacción en los distintos colectivos y asociaciones de gays y lesbianas de Catalunya. "Es uno de los más importantes logros de la igualdad legal conseguida por el movimiento homosexual", señalaba ayer en un comunicado la Coordinadora Gai-Lesbiana. "Ahora --proseguía-- todos los niños, con independencia de la orientación sexual de sus padres, tendrán los mismos derechos, el mismo grado de protección legal y las mismas oportunidades".

2.173 NIÑOS EN CENTROS
Los padres del bebé ahijado quieren permanecer en el anonimato, precisamente para velar por los derechos de su hijo. Y el bebé, en todo caso, ha topado con la fortuna de una sólida familia en un lugar, Catalunya, donde 2.173 niños residen en centros de la Administración.
Además, si hasta hace poco era difícil adoptar a un bebé en Catalunya (de ahí la pujanza de las adopciones internacionales) porque no había recién nacidos desasistidos, ahora sí los hay. Cada mes nacen en los hospitales catalanes un promedio de 10 niños sin familia. En unos casos porque su madre renunció al bebé (36 entre enero y junio de este año) y en otros (22 recién nacidos en el mismo periodo) porque la Generalitat quitó la tutela a los progenitores por su incapacidad para criar al menor.
La consellera Figueras, que ayer inauguró el primer Foro Internacional de Infancia y Familias que se celebra hasta el próximo martes en el edificio central de la Universidad de Barcelona, subrayó que, contrariamente a lo que algunos sectores conservadores vaticinaban, la reforma legal que permitió a las parejas de un mismo sexo formalizar procesos de adopción "no ha causado un alud" de solicitudes, ni ha representado ninguna ruptura social, como demuestra el limitado número de solicitudes presentadas.

28 PETICIONES
Desde que las parejas gays pueden acceder a la adopción se han presentado 28 solicitudes en Catalunya, de las que 20 son parejas de hombres y ocho de mujeres. De ellas, 24 parejas aspiran a una adopción nacional y las cuatro restantes a tener un menor en acogida.
Figueras dijo que esta puerta abierta a la paternidad homosexual reducirá las adopciones encubiertas que se hacían hasta ahora. Para ser padres, uno de los miembros de la pareja solicitaba la adopción, ya que las familias monoparentales nunca estuvieron excluidas del proceso. El problema surge con el otro miembro de la pareja que no tiene ningún vínculo legal con el niño con el que sí disfruta de un vínculo afectivo.
La titular de Benestar i Família reiteró que en las adopciones debe valorarse únicamente si la adopción es lo mejor para el menor. "Lo más importante es que sea un beneficio para el niño, que se tenga la seguridad de que será querido, cuidado, respetado y que no se le maltratará". Unos derechos, comentó Figueras, que en ocasiones no son respetados en el seno de las denominadas "familias tradicionales".

VETO EN OTROS PAÍSES
Que las parejas gays opten más por la adopción nacional que por la internacional es muy lógico, puesto que la mayoría de países susceptibles de disponer de niños para adopción (Rusia, China y Etiopía son los principales) no aceptan a los matrimonios homosexuales. No obstante, bastantes parejas sí han conseguido adopciones en esos lugares a base de realizar la petición como familia monoparental.
Únicamente en Brasil se ha formalizado alguna adopción de parejas gays españolas y se prevé que en breve pueda hacerse también en Suráfrica, donde la Constitución recientemente aprobada ya contempla este tipo de filiación.

2 comentarios:

Carlitos Sublime dijo...

Creo que las dudas sobre el desarrollo emocional de niños criados con parejas homosexuales se disipan cuando pensamos en la cantidad de gente normal que ha salido de familias (¿?) heterosexuales un tanto sui generis.

Vamos, que todos conocemos a padres que pasan de sus hijos, violentos, alcohólicos, etc., y a madres que se consideran meras transmisoras de material genético. ¿Y dónde está en ese momento el puto Foro de la Familia? En misa, supongo...

Gracias por permitir que me desahogue ;-)

Besos

Carlitos

Anónimo dijo...

La spersonas homofobas no les interesan los estudis estos, pero el mundo va avanzando y es imposible que no lleguemos a la igualdad.

¡Un saludo!